Ahora es necesario, más que nunca, echar una mano a toda la gente que lo está pasando muy mal, especialmente por efecto de la pandemia.
Cada día vemos en la televisión española como hay más y más gente acudiendo a comedores sociales y centros de distribución de alimentos para simplemente poder comer ellos y sus familias.
Ningún espectador, con un mínimo de sensibilidad, se quedaría de brazos cruzados viendo esta situación de emergencia y, sin duda, en la medida de sus posibilidades, aportaría lo mejor que pudiera para paliarla.
Cada día vemos en la televisión española como hay más y más gente acudiendo a comedores sociales y centros de distribución de alimentos para simplemente poder comer ellos y sus familias.
Ningún espectador, con un mínimo de sensibilidad, se quedaría de brazos cruzados viendo esta situación de emergencia y, sin duda, en la medida de sus posibilidades, aportaría lo mejor que pudiera para paliarla.